Salida por la puerta de atrás
elPeriodico de Aragón.
El alcalde de Utebo, Pascual Abós, ha sido condenado a inhabilitación de siete años para cargo público por un delito urbanístico. El fallo puede ser recurrido, y por tanto Abós podrá seguir al frente del consistorio hasta final de legislatura, pero tras 20 años al frente del ayuntamiento y anunciando hace ya meses que no repetiría como candidato, la sentencia deja a Abós en una posición de debilidad y le lleva a abandonar por la puerta trasera y con un buen disgusto encima. El fallo, además de condenatorio, es contundente en sus fundamentos, pues determina que Abós hizo caso omiso a fallos judiciales precedentes sobre una parcela en litigio y concedió una licencia de obras contraviniendo lo explicitado al respecto por el Supremo. Un caso más de flagrante incumplimiento de las normas de ordenación que debería hacer reflexionar a otros alcaldes que en ocasiones se ven seducidos (algunos quizás abducidos) por la actual fiebre del ladrillo.
El alcalde de Utebo, Pascual Abós, ha sido condenado a inhabilitación de siete años para cargo público por un delito urbanístico. El fallo puede ser recurrido, y por tanto Abós podrá seguir al frente del consistorio hasta final de legislatura, pero tras 20 años al frente del ayuntamiento y anunciando hace ya meses que no repetiría como candidato, la sentencia deja a Abós en una posición de debilidad y le lleva a abandonar por la puerta trasera y con un buen disgusto encima. El fallo, además de condenatorio, es contundente en sus fundamentos, pues determina que Abós hizo caso omiso a fallos judiciales precedentes sobre una parcela en litigio y concedió una licencia de obras contraviniendo lo explicitado al respecto por el Supremo. Un caso más de flagrante incumplimiento de las normas de ordenación que debería hacer reflexionar a otros alcaldes que en ocasiones se ven seducidos (algunos quizás abducidos) por la actual fiebre del ladrillo.
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